Cuando hemos hablado de fondos de inversión de renta fija, hemos hecho hincapié en que se trata de un tipo de herramienta financiera destinada a generar un rendimiento a partir de un capital inicial pero, ¿qué ocurre cuando el fondo de inversión pasa a ser de renta variable?
Cuando hablamos de fondos de inversión de renta variable estamos haciendo referencia a aquellos que invierten la mayoría de su capital en acciones o participaciones en empresas que cotizan o no en mercados bursátiles. Este tipo de fondos de inversión no es el más indicado para personas que no les guste asumir riesgo en sus inversiones financieras ya que debido a su dependencia de la evolución de los mercados bursátiles su rendimiento puede variar e incluso situarse en índices negativos.
Existe una amplia variedad dentro de los fondos de inversión de renta variable y cabe destacar que son indicados para personas que no requieren el dinero invertido a corto plazo pues las inversiones se suelen realizar a largo plazo. Especialmente se indica para clientes amantes de la bolsa y de sus movimientos, en este tipo de fondos de inversión, el saber apostar por las acciones o participaciones de una empresa antes de que estas suban puede generar elevados rendimientos al cliente.
La economía al desarrollarse por ciclo, permite a los grandes inversores intuir cómo podrán afectar determinadas decisiones de las empresas, los gobiernos u otros organismos competentes que tiene poder suficiente como para afectar a los mercados bursátiles con la toma de sus propias decisiones o la publicación de informes o noticias. El cliente especializado lo realiza de manera particular generándose su propia cartera de acciones y asumiendo personalmente los costes que esto le puede suponer, tanto económicos como de tiempo y dedicación.
Depender de los grandes mercados bursátiles puede suponer que mientras el cliente duerme, en otra parte del mundo se esté produciendo un “crack” bursátil, lo que provoca que el cliente vea como de la noche a la mañana sus acciones pasan de tener un valor elevado a valer prácticamente cero. Por este motivo existen los fondos de inversión de renta variable, en donde el cliente desea apostar por este tipo de inversión pero tampoco quiere estar pendiente 24 horas al día de la cotización de sus acciones, él mismo delega los poderes de su dinero en determinados gurús económicos que diversificaran su dinero en acciones y participaciones que previamente el haya podido elegir o que le hayan asesorado.
A diferencia de otros fondos de inversión, en los de renta variable no existe la permanencia obligatoria, el cliente puede entrar y salir cuando más le convenga. Esto es así por lo que se denomina “oportunismo económico” determinados “Holdings” compran grandes paquetes accionariales de determinadas empresas que prevén que pueden revalorizarse para después venderlos por una cantidad más elevada.
Dependiendo del tipo de fondo variable que elijamos, obtendremos un mayor potencial económico. Acciones o participaciones de empresas con mayor riesgo siempre van a ofrecer una mayor rentabilidad, mientras que los valores seguros, es decir, grandes empresas consolidadas ofrecerán una rentabilidad menor. Podemos optar entre muchas opciones a la hora de elegir nuestro fondo de inversión de renta variable, aunque los más comunes son:
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) regula los fondos de inversión de renta variable. Este tipo de fondos de inversión otorga importantes beneficios fiscales. Por otro lado, las comisiones cobradas en España son las más bajas de todo el continente Europeo.
Segú fluye la situación económica, los fondos de inversión de renta variable no son la mejor opción por la que decantarse.
De entre todos los fondos de inversión de renta variable podemos destacar diferentes tipos. Enumeramos a continuación los fondos de inversión de renta variable más solicitados:
Los fondos de inversión de renta variable de Estados Unidos ofrecen a los inversores una gran cantidad de acciones y participaciones acordes a todos los gustos y preferencias de los mismos. Invertir en este tipo de fondos en Estados Unidos es hacerlo en el mayor y más importante mercado bursátil del mundo.
Los fondos de inversión de renta variable emergente hace referencia a los países que están creciendo muy rápido económicamente. Invertir en este tipo de fondos puede acarrear diversos riesgo, uno de los más temidos es el hecho de que se produzca un frenazo en el desarrollo.
Los fondos de inversión de renta variable nacional hacen referencia a todos aquellos fondos que se consideran de caracter nacional, es decir, pertenecen al pais de residencia del inversor. La renta variable presenta la ventaja del alto rendimiento y el incoveniente del elevado riesgo.
Los fondos de inversión de renta variable en la zona euro son herramientas de caracter financiero destinadas a la adquisición de acciones de empresas en toda la zona euro. Ofrecen una mayor rentabilidad a lo largo del periodo a cambio de un mayor riesgo.
Los fondos de inversión de renta variable a nivel internacional ofrecen la posibilidad a cualquier inversor de adquirir acciones o participaciones de cualquier empresa en cualquier lugar del mundo, así como de cotizar en cualquier mercado financiero que quiera.
Los fondos de inversion de renta variable de Japón que ofrece su mercado financiero han sido afectados por el desastre natural que azotó la costa oeste con la irrupción del tsunami. El gobierno japonés tiene en su mano las decisiones para que los mercados bursátiles varíen a la alza o a la baja.